sábado, 11 de diciembre de 2010

Ciclo de la Enfermedad


Un concepto fundamental de la enfermedad que nace con el Dr. Hamer.

jueves, 9 de diciembre de 2010

La importancia de los rieles



En el momento del bioshock, todos los elementos sensoriales quedan grabados (hora del día, polvo, ruido…), basta que un solo elemento (mientras sea significativo) reaparezca para que la totalidad de la reacción fisiológica reaparezca.


Por ejemplo, en presencia de pelo de caballo la Sra. Y revive la intrusión en su espacio sin tener que acordarse del drama, de sentir una emoción de frustración, es entonces que estornuda. Reacciona dentro de ella para ella. En presencia de un elemento del drama, el raíl, la reacción física de adaptación aparece enseguida.


Se trata siempre de un mecanismo que señala el peligro, refiriéndose al bioshock.


Algunos ejemplos:


- Unos niños de 11 años juegan a médicos en el heno. Alguien los descubre, ¡Shock!


A partir de entonces, cuando huelen el heno, el antiguo conflicto de peste vuelve. El recuerdo induce la fiebre del heno. Cuando esto se explica, las crisis desaparecen. Había una reacción al polen. Olemos por la nariz pero también a través de otros sentidos, como la piel. En cuanto el polen entra en contacto con la piel, hay una reacción, choque inmediato seguido de vagotonía.


- Una madre deja de dar el pecho. El bebe vive mal el destete: conflicto de separación con la madre. El niño recibe leche de vaca = lo que le recuerda la separación con la madre (puesto que ya no hay contacto físico). Incluso cuando el niño se halla frente a un vaso de leche, hay un recuerdo del conflicto de separación, incluso al oír la palabra “vaca”.


- Un gato ha sido operado, es negro. Duerme en la habitación. Al día siguiente muere. Choque para el niño. En cuanto ve un gato negro, el niño revive el conflicto de separación y aparece una alergia cutánea. En cuanto lo comprende, se cura. Su hermana es alérgica a los pelo de poney. A la edad de 5 años, su pony murió. Conflicto de separación. En cuanto ve un pony, alergia cutánea, su conflicto de separación pasa en vagotonía. Por ello, sus padres la mantienen alejada de ponies y caballos, ¡lo que mantiene activo su separación!

Alergia = Solución


“Sin ser conscientes de ello, los humanos así como los animales, grabamos las circunstancias concomitantes en el momento del choque. Si éstas se representan más tarde, estas circunstancias causarán lo que denominamos alergia” Dr. Hamer.


Otra forma de resolución a través de las alergias la podemos vislumbrar a través del siguiente caso:


La joven W ya no tiene su gatito, su padre que estaba molesto por el animal lo “perdió” a 50 km de casa. Por la mañana, la niña lo llama y llora por él, pero su padre le obliga a guardar silencio.


Está en conflicto activo. Diez días pasan y el gatito vuelve a casa, esquelético; la niña está muy contenta. Pero el gatito ha vuelto para morir. La niña estará en conflicto de separación permanentemente. Cada vez que se encuentra un gato, pasa en solución y aparece un eczema que supura.

Alergia = Peligro



En el instante del bioshock, nuestra mente inconsciente asocia uno o varios de los elementos presentes en el entorno. Ejemplo: una mujer agredida en la oscuridad, en invierno, por un hombre barbudo, calvo, con gafas y perfumado, tendrá miedo de encontrarse con un hombre barbudo, calvo, con gafas en la oscuridad. O sentirá miedo en la oscuridad, o se sentirá en peligro en presencia de alguien barbudo o calvo…


Este elemento (el alérgeno) sirve de señal de peligro, como en el caso del hombre prehistórico que llega a la pradera en otoño y recuerda ser atacado por un lince la primavera anterior.


Su inconsciente biológico (psique, cerebro, órganos) lo recuerdan y él no tiene la necesidad de acordarse. Ello deja libre la mente consciente para otras cosas.


De otro lado, cuando uno o varios de los elementos del bioshock (raíl) se representan, inmediatamente la tríada psique-cerebro-órganos pasa en simpaticotonía, en fase de supervivencia, de estrés.

Si nada sucede (que es lo más frecuente: si el nuevo barbudo no la agrede), esta mujer pasará en vagotonía: es la alergia propiamente dicha (rinitis, eczema, inflamación). A partir del choque, aparece una corta simpaticotonía y el paciente pasa enseguida en vagotonía, ambas fases se superponen.

¿Cuál es la biodescodificación de la alergia?



Hay 3 elementos: alérgeno, síntoma y localización en el tiempo.

El síntoma nos orienta hacia el vivencia no alcanzada, la solución biológica impresa.

Aquí es donde se halla el aporte específico de la Biodescodificación.

Ejemplos:

- La Sra. X tiene conjuntivitis. ¿Cuál es la vivencia de la conjuntivitis? Separado de los ojos, perdido de vista.

- La Sra. Y estornuda: ¿quién es el intruso en su espacio de seguridad y libertad? ¿Des de qué edad?

- La Sra. X tiene alergia al polen de ciprés.

- La Sra. Y al pelo de caballo.

- Le pregunto a la Sra. X: "Antes de los 18 años, ¿de quién fue separada de los ojos, en primavera, en el momento de producción de polen, este esperma vegetal de ciprés (en francés: tan cercano)?" La pregunta es tan precisa que cruza la cortina de humo de la que hablamos en PNL, como si fuese una barrera del inconsciente que censurar todo choque no gestionable.

La mujer me responde “Hacia los 17 años, mi novio se reúne conmigo en un banco del pueblo.” La Sra. empieza a llorar. “Me hace saber que se traslada debido al trabajo de su padre; llora desesperado…”

Entonces, quiero consolarle y dejo de lado mi dolor. Busco palabras tranquilizantes, aunque es terrible, ¡no volveré a verlo!

- Le pregunto a la Sra. Y: "Antes de los 16 años (antes puesto que la alergia se desencadena en el segundo contacto con el alérgeno) ¿qué vivió como intrusión en su espacio en presencia de caballos?"

La mujer me responde: "Mmm no lo veo claro… ¡ah sí! ¿Cómo es que no pensé en ello? Mientras paseaba con un señor, ambos a caballo, me arrinconó contra un muro para aprovechar y tocarme. Además, vivía al lado de mi casa así que ¡lo cruzaba a menudo!

La alergia desapareció.

En resumen:

· La alergia es el conflicto del recuerdo del entorno y decoración de la primera vez.

· No existe alergia sin choque precedente.

· Según el tipo de vivencia en el momento del choque, se codificará cierta parte del cerebro y del cuerpo.

· Ejemplos:

Conflicto de separación (con respecto un animal, un lugar, etc.) à piel, eczema

Separación de uno mismo y agresión à psoriasis

Si hay noción de miedo à tráquea, laringe

Si hay angustia, “huele mal” à senos, fiebres del heno.


Recordemos que no hay sistemáticamente un conflicto relacionado con la separación en la alergia.

La intención positiva es doble:

Estar separado del malestar.

Estar en contacto con el bienestar.

Alergias y aprendizajes



Antes de abordar la biodescodificación de las alergias, pienso que sería útil preguntarnos qué es una alergia.

Definición médica

Su etimología es allos: otro / ergos: reacción.

Se trata pues de una reacción a aquello que el sujeto considera como algo distinto a él mismo, algo extraño.

Lo que caracteriza al sujeto alérgico es que reacciona a cierta información de una manera exagerada, amplificada. La alergia manifiesta una hipersensibilidad. Esto precisa de una reacción excesiva frente a lo extraño.

Manifiesta asimismo una modificación de las reacciones de un organismo frente a un organismo patógeno (alérgeno) cuando este organismo ha sido objeto de un ataque anteriormente por el mismo agente (localización en el tiempo).

Reacción excesiva durante el segundo contacto con el agente extraño.

Los tres puntos específicos de cada alergia

1. El alérgeno, es decir el “allos”: se trata de una información química, táctil, auditiva, etc. Que no es tóxica por si misma (algodón, polvo, polen, pelo, leche, huevo…) pero que causa una lesión a partir del segundo contacto con el sujeto. Prácticamente cualquier cosa puede convertirse en un alérgeno.

2. La reacción, es decir el “ergos”: se manifiesta por una lesión de los tejidos (ej. Urticaria), un exceso (en lugar de sonarse 2 veces al día, debemos sonarnos 25veces), una hipersensibilidad (ej: la lana no cosquillea sino que su contacto es insoportable). Prácticamente todas las enfermedades pueden ser alergias (siempre que hallemos e identifiquemos el elemento desencadenante): fiebre del heno, asma, urticaria, laringitis, eczema, colapso circulatorio, asfíxia, hipersecreción bronquial, estornudo, prurito, etc. En la mayoría de los casos se trata de una inflamación localizada: edema, rojez, calor, dolor.

3. Localización en el tiempo. “Hasta los 18 años podía revolcarme en los pelos de caballo. Pero desde entonces, en cuanto veo una foto de un caballo por televisión, empiezo a rascarme. ¡Incluso sólo oír relinchar puede hacerme estornudar!” A veces la alergia empieza con el nacimiento. En cualquier caso, hay un inicio, un ritmo, una regularidad: “cada primavera desde 1999…”, “a partir del mes de septiembre”.

La opinión de los científicos de referencia

Ernest Rossi escribe en su libro “De la mente a la molécula”, “un recuerdo, en cuanto está ligado a un estado de consciencia dado, alterado por el alcohol o los barbitúricos, por ejemplo, se halla condicionado por dicha sustancia, y permanece asociada a ésta.

“Cuando la sustancia es metabolizada y desaparece del cuerpo, el alérgeno, los recuerdos con los que está asociada se disocian o son olvidados momentáneamente. Sin embargo, no se pierden realmente, puesto que cuando readministramos el alérgeno, la droga, los recuerdos vuelven. Si el recuerdo ligado a un estado de consciencia es recuperado, los aprendizajes y los comportamientos derivados de este recuerdo también pueden ser modificados. Los recuerdos ligados al estado podrían conllevar problemas psicosomáticos. La curación es posible al recuperar el recuerdo y la paz frente a éste, mediante el sesgo de la hipnosis terapéutica u otras formas de terapia relacionadas con el cuerpo y la mente.”

Inspirándose en los últimos avances en neurobiología de la memoria y del aprendizaje, Rossi utiliza y traza precisamente el camino que sigue la información, para pasar de la mente a la molécula. Encuentro este texto apropiado y relacionado con el tema que hoy nos ocupa: la alergia.

¿Cuál es el argumento?: un recuerdo, un drama, por ejemplo un bioshock, ligado a un estado de consciencia (o de inconsciencia) desagradable, una vivencia que hiere. Una sustancia química, un raíl (alcohol, barbitúricos, por ejemplo), el alérgeno presente durante el choque condiciona la presencia o ausencia de vivencia. La sustancia química administrada, el recuerdo, la vivencia vuelven. Una vez desaparece la sustancia química, todo se va.

Tratemos ahora otro texto de un terapeuta ericksoniano: M. Malarewicz: “El síntoma es considerado en sí mismo como un aprendizaje. Es fijado a partir de una respuesta fisiológica, o de un posicionamiento psicológico oportuno y pertinente, delante de una situación de agresión o choque emocional, para ser reproducido posteriormente en ausencia del estímulo y a distancia del estímulo original, exactamente cómo funciona un tic doloroso. El síntoma es primero una respuesta útil, cosa que la aproximación sistemática nos recuerda continuamente como connotación positiva, antes de ser reproducido generalmente bajo una doble demanda, interna que vamos a denominar auto-hipnotica y externa, denominada hetero-hipnótica.

Por Christian Fleche

Virus a nuestro servicio



La descodificación biológica nos propone una visión definitivamente revolucionaria de los microbios, virus y hongos (incluso políticamente incorrecta): no representan la causa de la enfermedad, su actividad se observa durante ciertas enfermedades, y están allí para ayudar al organismo en su fase de reparación.


Los virus, al ser más pequeños que las bacterias, sólo son visibles con el microscopio electrónico, tuvimos que esperar su invento para identificarlos. Por ello, se creyó durante mucho tiempo que habían aparecido posteriormente en la escala evolutiva. Falso! Hoy en día sabemos que convivieron con las células primordiales (bacterias) de las cuales surgimos. He aquí un punto que pone en duda la teoría ontogenética del Dr. Hamer puesto que los virus han estado presenten desde las primeras etapas de la evolución.


A lo largo de la evolución, los virus han insertado secuencias genéticas a los organismos que han penetrado, enriqueciendo así sus genomas. Los virus tiene pues el poder de enriquecer o modificar el genoma de un ser vivo comportándose como portadores de información genética. Según los genetistas, han jugado un papel en la evolución de las especies comparable al de los cambios climáticos, un rol de potentes agentes de mutación, respondiendo así a los famosos eslabones perdidos de la evolución.


Así los virus conviven con nosotros desde la noche de los tiempos y nos hemos habituado unos a otros de tal manera que la mayoría no causan ningún daño. Al contrario! Algunos virus sitiaron nuestras células y se transmitieron de generación en generación como cualquier otro gen celular. Estos virus, cualificados de endógenos, representan hoy el 10% de nuestro patrimonio genético. Entre éstos, algunos tienen un papel capital en la reproducción. Después de la fecundación, el huevo, rodeado de trofoblastos, migra hacia el útero donde se implanta. En esta etapa, los trofoblastos se activan, luego se fusionan para formar el tejido de la placenta. Esta fusión está dirigida por genes propios de un virus endógeno desde hace años.


Los virus estan continuamente inventando nuevos genes, nuevas funciones que desconocemos. Estos genes virales contituyen la reserva capaz de enriquecer los genomas de los organismos de los tres reinos vivientes, contribuyendo a su evolución. La virología es una disciplina muy joven, con un campo inmenso por explorar, están muy implicados en la terapia génica.


Por Marie José Dal Zotto

Desarrollo embrionario y evolución / Piso IV



En plena era primaria, la Tierra no ofrece mucha seguridad: casi cubierta de agua, empieza a haber climas variados, grandes erupciones volcánicas, terremotos terroríficos. Entramos en la era secundaria, emergen los continentes, y los animales marinos, quizás por lo apetitosa que resulta la comida verde y dulce, empiezan a salir del agua. Son los anfibios, luego los reptiles. Su sistema nervioso se hará más complejo, del estado de cadenas de nervios y lóbulos, aparece el cerebro, a veces voluminoso, reducido al equivalente de nuestro tronco cerebral. Es con la aparición de la aves que se desarrollará el cerebelo y en los mamíferos estará constituido por el tronco cerebral, el cerebelo, la médula o sustancia blanca y el córtex, rudimentario en los mamíferos primarios, y más complejo hasta llegar a los primates. Entramos entonces en la era terciaria. El desarrollo del córtex corresponde a la cuarta gran etapa de la evolución que no dejará de ser cada vez más competente con la evolución del ser humano: ésta permite relacionarse con sus prójimos y comunicarse.

Otro estadio interviene ahora: la neurulación. A partir del ectodermo se estructurará el sistema nervioso. Al mismo tiempo, la cuerda dorsal será rodeada por unas estructuras óseas que darán lugar a las vértebras, mientras que los tejidos vecinos construirán poco a poco la masa muscular, los huesos y la sangre.

El embrión se convierte entonces en feto, respira mediante las “branquias”, se nutre según demanda a través de la placenta, está bien protegido dentro de la bolsa amniótica y se comunica intensamente con su madre que forma, sin embargo, parte de él mismo. Continua a desarrollarse, cada una de sus células se especializa más y más, empieza a moverse en el medio acuoso pero llega un momento en que este espacio no es suficientemente grande. Llega un momento en que quizás le apetece probar las sustancias dulces de la Tierra. Pero no es como los animales del secundario que salían del agua en un clima a veces apocalíptico que el desarrollo se terminará.

Un acontecimiento mayor marca el final de la era secundaria y el inicio de la era terciaria: la desaparición de los dinosaurios (para algunos debido a la caída de un gran meteorito, para los otros una enorme erupción volcánica…). Ello acompañado de un cambio climático radical consecuencia del cual habrá profundas modificaciones en la flora y la fauna. Habiendo desaparecido los dinosaurios y la mayoría de los grandes reptiles, el campo queda libre para el desarrollo de los mamíferos. Las especies se diversifican y la familia de los primates (de la cual forma parte el Hombre) florece. En ciertas especies, el volumen craneal aumenta considerablemente. Algunos optarán por la vida arborícola, lo que dará lugar a los monos actuales. Otro optaran por la marcha bípeda y será en la última parte de la era terciaria cuando aparecerán los Australopitecos, ancestros de los futuros Homínidos.

A parte de las constataciones anatómicas como la estructura de la pelvis y la posición del hueco occipital, que marca la disposición del cráneo sobre las vértebras, y los acerca al hombre, algunos descubrimientos arqueológicos prueban que existía una “industria” que atestigua un uso diferente del cerebro. Y de hecho, el cerebro no dejará de evolucionar hasta nuestros días. ¿Cómo tiene lugar este desarrollo? El cortex o materia gris está formado por neuronas dispuestas en sucesivas capas corticales, todo ello sostenido por la glía. Las neuronas están conectadas entre ellas mediante sinapsis, y sabemos hoy en día que la red sináptica así formada, de una gran plasticidad, representa la inscripción de la experiencia. Esta plasticidad parece ser la base de los mecanismos del aprendizaje y memorización.

Cuando el bebé sale de la cavidad acuosa, cuando nace, ya posee un cortex bien formado, fruto de su actividad intrauterina presente pero también de la lenta evolución de las especies que está inscrito genéticamente en su “programa”. Así pues las grandes líneas de la arquitectura neuronal y las conexiones sinápticas se establecen antes del nacimiento. Sin embargo, la formación de las sinapsis aun está lejos de estar terminada y cerca del 50% de las conexiones se asientan después del nacimiento. Alrededor del nacimiento, ¡dos millones de sinapsis se establecen por minuto! Después se alcanza una estabilización pero no deja de reorganizarse, en función de las experiencias vividas, hasta la muerte.

Por otra parte, la mayoría de las funciones, entre otras, digestiva, inmunitaria, motriz, no serán totalmente operativas antes de los 3 años, o más tarde.

No se pondrá en posición vertical hasta haber explorado el entorno a cuatro patas, como la mayoría de mamíferos.

Cualquier aprendizaje implicará diferentes etapas, ¡incluso lo que podría parecer fracasos! Tomas de dirección, cambios de dirección…así como la imagen que nos deja la historia de esta larga evolución que es la Vida.

Así mismo, pasará su vida a revivir su pasado: la adolescencia para poner un poco de orden en las sinapsis, testigo de la experiencia de la infancia, con el fin de alcanzar su madurez con buenas bases… Y, si no es suficiente, la Vida, en cada instante le ofrecerá la posibilidad de afrontar las dificultades aun no superadas.

Necesitará realmente 20 años para llegar a la madurez llamada “neuronal”, la edad adulta, 20 años de aprendizaje, coloreados a veces de éxtasis, a veces de lágrimas, de alegría, de amargura…de todas las variantes posibles de las emociones que enseñará a su cuerpo para que su cerebro las codifique, las clasifique, las reconozca.

Durante estos 20 años, deberá perder la ilusión de su toda potencia. ¿Representa esto un guiño para compadecer la absoluta y definitiva desaparición de los dinosaurios…? Enormes, potentes, pero obligados a desaparecer debido a la incompatibilidad de existir en un ambiente incompatible con su monstruosidad.

Desarrollo embrionario y evolución / Piso III



La aparición de una estructura interna que permite desplazarse para buscar comida o escapar de los depredadores constituye la tercera etapa de la evolución. Hasta mediados de la era primaria, los vertebrados son exclusivamente acuáticos, el medio les aporta todas las fuentes indispensables.

Es el mismo caso que nuestro embrión que se desarrolla en el líquido amniótico, que le aporta también todos los recursos indispensables…y los necesita pues se van a producir transformaciones extraordinarias:

Llegamos al estadio de la gastrulación donde aparecen los 3 principales tejidos del embrión que son endodermo, mesodermo y ectodermo. Se dibuja entonces la línea primitiva esbozo de la cuerda dorsal (como los peces), que se convertirá en la columna vertebral. Estamos en este estadio, alrededor del día 21 y durante 260 días este embrión no dejará de desarrollarse para salir del agua.

Por Marie José Dal Zotto


Desarrollo embrionario y evolución / Piso II



Llegamos a la era primaria o paleozoica, con la aparición de los primeros vertebrados. Hasta este momento, hablábamos de animales invertebrados, el único tejido que podía eventualmente conferirles solidez era la cubierta protectora en caso de convertirse en una coraza. Los vertebrados están provistos de una estructura interna que les confiere cierta rigidez y posibilidad de moverse. Incluso si, en el caso de los peces, esta estructura interna que denominamos la espina queda lejos de la complejidad de nuestra columna vertebral, es su ancestro.

Por Marie José Dal Zotto


Desarrollo embrionario y evolución / Piso I



La vida animal en la Tierra empezó con la aparición de los organismos unicelulares. Estos organismos, ya bastante complejos vistos los organismos precedentes (bacterias primitivas, bacterias fotótrofas, células vegetales) siguen teniendo un funcionamiento muy arcaico que constituye la primera etapa de la vida: respirar, alimentarse y eliminar los desechos, todo ello para reproducirse. Se podría decir que la vida no tiene otra finalidad que perpetuarse, que ese programa del ADN nuclear de cada célula se lleve a cabo, directa o indirectamente.

Parece ser que esta primera célula animal nace en una matriz cálida y húmeda. Luego la vida inventa, sin duda con el juego de mutaciones, la reproducción sexual: dos polaridades se distinguen, dos polaridades que se atraen irresistiblemente puesto que una contiene lo que la otra necesita para reproducirse y viceversa. ¿Existe mejor invento para diversificar la expresión de esta vida? ¿Para hacerla siempre más competente?

Es así como el ser humano empieza su Vida, en un medio energético cálido y húmedo: un espermatozoide irresistiblemente atraído por un óvulo se reorganiza íntimamente hasta formar un huevo, es decir, la fusión de dos polaridades complementarias, la fusión de dos ADN, la fusión de dos programas. De esta fusión nacerá un individuo cuyo capital genético único contenido en su ADN será resultado de un cruce con 2 elevado a 42 posibilidades!

Durante el curso de la evolución – aun nos encontramos en el periodo precámbrico – los seres unicelulares se organizarán en colonias. Las mutaciones a lo largo de millones de años, esta colonia se convertirá en un ser pluricelular. Es decir, cada una de las células hasta entonces indiferenciada se organizará en tejidos y se especializará en una función en particular con el fin de adaptarse y perpetuar la especie. Habrá así seres primitivos pero altamente especializados, provistos de un tubo digestivo, de un aparato respiratorio rudimentario (seguimos en el agua) y de una cubierta protectora. Esta cubierta, que podrá tomar varias apariencias, representa la segunda gran etapa: protegerse en un medio, a menudo, extremadamente hostil.

El estudio embriológico del ser humano nos explica la misma historia con una diferencia: una se desarrolla durante 2 millones de años, la otra en pocos días. De hecho, el huevo va a dividirse, por mitosis, en 2 células, luego en 4, en 8, en 16 y finalmente 32 células. En cuatro días tenemos este conjunto de células denominado mórula. La mórula se ahueca y constituye la blástula. Aquí aparece la primera gran etapa de diferenciación: las células del “exterior” y la células del “interior” se diferencian y se organizan en dos capas distintas, una destinada a dar nacimiento a los principales tejidos del embrión, y la otra, dará lugar a una especie de anexo que lo protegerá llamado amnios.

Por Marie José Dal Zotto

Desarrollo del cerebro y conflictos



Cuando aparece una enfermedad, se evidencia la aparición de focos de actividad en el cerebro (focos de Hamer). Estos focos se localizan en cuatro partes muy bien definidas:


1- El Tronco Cerebral

2- El cerebelo

3- La médula o sustancia blanca

4- El córtex


Refiriéndonos a las ontogénesis (refiere al proceso evolutivo de un individuo dentro de una especie), constatamos igualmente:


- Los focos de Hamer situadas en el tronco cerebral corresponden a los órganos cuyo origen es el endodermo.

- Los focos situados en el cerebelo y la médula (sustancia blanca) se originan en el mesodermo. Los órganos relativos al mesodermo tienen dos características: bien están cercanos física y biológicamente a los órganos arcaicos de supervivencia y que el Dr. Hamer vinculó con el mesodermo “antiguo”, bien son órganos ligados a la vida consciente y voluntaria, regidos por el sistema nervioso cerebroespinal y están vinculados al mesodermo llamado “nuevo”.

- Los focos situados en el córtex tiene por origen el ectodermo.


En conclusión, estamos obligados a constatar la evidente analogía cronológica entre la aparición de los diferentes desarrollos del cerebro, las cuatro etapas de la evolución de la vida y las cuatro familias de conflictos.


Por Marie José Dal Zotto

Filogénesis y resolución de conflictos biológicos



La vida a los largo de millones de años se organizó en cuatro etapas sucesivas, siempre buscando garantizar la supervivencia de la especie, así como la del individuo:

1- Garantizar las funciones vitales del organismo: respirar, nutrirse y eliminar los desechos, reproducirse.

2- Protegerse de las posibles agresiones del entorno.

3- Desplazarse y usar la potencia muscular, cotejarla.

4- Mantenerse en pie, fabricar herramientas y comunicarse con los prójimos siendo consciente de la propia identidad.

Si el tiempo transcurrido entre la época Precambiana y nuestros días se representara a lo largo de un año, la primera etapa se situaría hacia el mes de mayo, la segunda hacia junio, la tercera en octubre y la cuarta aparecería entrada la noche del ¡31 de diciembre! Nos damos cuenta de que las dos primeras etapas son consecutivas y dentro del primer trimestre, siendo realmente arcaicas. Mientras que las otras dos siguen el mismo modelo, son modernas.

La evolución de la vida sobre la tierra, esa lucha por adaptarse a los eventos ambientales que la impactan, se refleja directamente en nuestra biología y en nuestra manera de solucionar los conflictos. Sobre estas 4 etapas, nosotros, los humanos, vehiculamos y experimentamos los recuerdos desde nuestra concepción.

Cada una de las anteriores etapas evolutivas se expresa en los diferentes estadios embrionarios que, a su vez, se corresponden con el desarrollo de los diferentes organos. Si algún evento impacta al individuo el conflicto asociado estará igualmente relacionado con la función del órgano. En definitiva, todo se vincula en la búsqueda de una solución: etapa evolutiva = estadio embrionario = función del órgano = re-solución del evento a través de la enfermedad. De esta forma encontraremos cuatro tipos de conflictos:

1- Conflictos relacionados con las funciones vitales.

2- Conflictos relacionados con la protección.

3- Conflictos relacionados con la motricidad, como elemento de acción (gestos y desplazamiento) y como elemento de potencia, de nuestro valor.

4- Conflictos relativos a nuestras relaciones con los demás, nuestro entorno (territorio) y con nosotros mismos (identidad).

Delante de un conflicto, sea cual sea, la Vida que nos quiere y cuya vocación es perpetuarse, hallará una solución biológica de adaptación, como lo ha hecho siempre en el transcurso de la evolución de las especies. Las enfermedades son la prueba de los conflictos ligados a esta adaptación.


Por Marie Jose Dal Zotto